domingo, octubre 15, 2006

EL MEJOR AMIGO DEL HOMBRE

Hoy me encontré con un señor que podría tener unos, muy bien llevados, ochenta años.
Vestía con exquisita distinción un buen traje gris, camisa blanca y corbata. Me fijé que llevaba gemelos y pasador de corbata. Sus zapatos estaban relucientes.
Llevaba buen paso, supongo que en dirección a una de las iglesias de la pequeña villa norteña donde vive. Era cerca del mediodía y las campanas tañían llamando a la misa de las doce.
Yo iba en dirección contraria y cuando llegamos a la misma altura, se detuvo.
Con mirada triste y voz emocionada me dijo:
-Le envidio. Pasea usted con el único amigo que va a tener en su vida.
Puse cara mitad de asombro y mitad interrogativa. Al mismo tiempo que le preguntaba:
-¿Tiene usted uno?.
-Lo tuve durante doce años. Por desgracia se me murió hace cinco.
-Cuídelo- Continuó diciendo.
-Aún recuerdo lo mal que lo pasé cuando lo perdí- Mientras decía esto, sus ojos se llenaron de lágrimas.
-¿Por qué no busca otro?- Le pregunté.
-Ahora ya no me dejan tener otro. Vivo en una residencia de ancianos y no los permiten.
Desconcertado, sin saber muy bien que decir, me despedí con la excusa de seguir el paseo.
El anciano miró hacia abajo y una pequeña sonrisa se dibujó en sus pálidos labios.
Unos vivarachos ojos le devolvieron la mirada.
Dio media vuelta y continuó su camino.
Miré hacia atrás, noté que su paso era más lento, me pareció que su figura se había empequeñecido a pesar de la poca distancia recorrida.

3 comentarios:

Unknown dijo...

te envidio por saber tener la responsabilidad de acoger en tu vida un amigo tan especial... yo creo que no podría... no me dejan ni tener gato....
aunque tampoco creo me me decidiese a tenerlo.... que she sho...
como se llama??

mrci dijo...

Uhmmm...
No se yo si ya no me estoy arrepintiendo. :)
Imposible controlar sus excesos.
Es un pequeño bebé de dos meses en fase de exploración total.
No hay más que ver la cara que tiene de no haber roto un plato, para saber que los rompe todos. :)
Es una gran responsabilidad, pero compensa si uno está concienciado y la asume.
Los gatos son otra cosa. No peores, distintos.
Este pequeño "chantajista emocional" es capaz de dar afecto y cariño sin pedir nada a cambio.
Bueno...
Solo pide que juegues con él, que le des comida, que lo saques para hacer sus necesidades (primero hay que enseñarle a que no lo debe de hacer en casa), que lo lleves al veterinario, que lo laves, que...
Vamos na. :)
Saludos norteños :)

Unknown dijo...

hace tiempo estuve viviendo en un pueblo de burgos con una chica... tenía una perra que se llamaba "Lola" pasotr alsaciano abino.. una preciosodad... de esa perra solo puedo decir que durante el tiempo que estuve allí fue una fiel compañera... nunca me hizo sentirme solo ...
la verdad es que las miradas de los perros me matan... me desarman... tienen una profundidad que mucho hombres jamás llegan a alcanzar... espero que nos vayas teniendo informados de su crecimiento y su vida a tu lado.
saludos.